Castle in the sky: Studio Ghibli no sabe fallar

Una aeronave se desliza sobre un mar de nubes, en una noche de luna llena. Muska, un agente secreto del gobierno, acompaña a una chica llamada Sheeta a la fortaleza de Tedis. Repentinamente la nave es atacada por los piratas que, al igual que el gobierno, buscan el secreto de la piedra mágica de levitación que Sheeta lleva alrededor del cuello. La piedra es la llave que abrirá las puertas de La Fortaleza celeste, una isla flotante en medio del cielo creada por una misteriosa raza que hace mucho tiempo desapareció del planeta. Pazu, un joven muchacho, se hace amigo de Sheeta, le ayuda a escapar de sus seguidores y juntos se disponen a resolver el misterio de la Fortaleza Celeste. Cuando Sheeta y Pazu inician su viaje hacia la Fortaleza Celeste, ponen en marcha una cadena de acontecimientos irreversibles. En este misteriosos lugar encontrarán un tesoro mucho más grande que el poder de gobernar el mundo

Hayao Miyazaki es uno de los animadores y directores más grandes en Japón. Los argumentos entretenidos, y unos guiones plagados de personajes con carácter y humanidad, amen de una animación que quita el aliento le han merecido renombre y reconocimiento internacional tanto de la como del público. Entre las influencias de Miyazaki, podemos nombrar, entre otros, a los directores Mizoguchi y Kurosawa, los pintores del “mundo flotante” Utamaru y Hokusai, los escritores Tolkien, Verne, Asimov, Aldiss y Le Guin, o los directores de animación Lev Atmov, Paul Grimault, Yuri Norstein y Frederic Back. Lo que realmente caracteriza a Miyazaki es la meticulosidad de sus historias, su atención al detalle, su perspectiva individualista y la gran diversidad de los temas y escenarios; también, en algunos casos, su forma de integrar símbolos o referencias apocalípticas en sus historias. Sus películas son tremendamente originales, pero de una manera muy japonesa: diferentes culturas y estilos artísticos coexisten en una mezcla aparentemente anacrónica pero que se corresponde perfectamente con la inestabilidad y la multiplicidad del Japón actual.

“Castle in the sky”, una historia basada en los famosos viajes de Gulliver es una muestra mas del talento desbordante de este inigualable autor. La historia está llena de buen ritmo y personajes curiosos y ambiguos (una característica recurrente en el cine de Miyazaki), así como la de dejar mensajes, críticas sin caer nunca en los baratos recursos del sermoneo y la sensiblería; y en el caso de este sencillo pero encomiable y entretenido filme nos encontramos con criticas al militarismo y el mal empleo de la tecnología, así como interesante y nada barato mensaje ecológico.