Dark Water: En plena saturación del terror nipón

Yoshimi Matsubara, una mujer recién divorciada, lucha para obtener la custodia legal de su hija de cinco años. Su ex-marido no está dispuesto a facilitarle las cosas y saca a relucir su pasado de alucinaciones y tratamiento psiquiátrico. Madre e hija se mudan juntas a un pequeño apartamento, oscuro, triste y mohoso. La pequeña Ikuko comienza a ir a su nueva escuela y Yoshimi ha encontrado un nuevo trabajo. Pero la persistente presencia de agua sucia en el nuevo edificio parece el heraldo de los peores presagios. Agua sucia en el ascensor, en el techo del apartamento, bajo la puerta de uno de los pisos…. Además de la misteriosa presencia de una mochila roja que había pertenecido a una niña que desapareció dos años antes. Aunque Yoshimi lucha desesperadamente para encontrar en su interior fuerzas pensando en Ikuko, su terror va en aumento a medida que se acerca al descubrimiento de la conexión entre todos estos sucesos; y no está nada preparada para la verdad que le depara el futuro.

El tándem Hideo Nakata y Kôji Suzuki, ya venian previamente de triunfar previamente con la super taquillera (aunque artísticamente convencional) “The Ring” o “El Aro”, la cual provocó un exitoso remake norteamericano que las nuevas generaciones escasas de haber visto buen cine clásico han llegado incluso a la exagerada adoración de considerarla la mejor película de horror de todos los tiempos, cosa bastante errada, sobre todo cuando hablamos de una gama de cintas que no ha hecho mas que beber del éxito reciente de filmes como “El Sexto Sentido” y “Los Otros”.

Lo cierto es que esta gama de películas de niño / niña diabólica o de muchachitos / muchachitas que se la pasan viendo fantasmas, muertos y demás particulares, en aquel momento realmente comenzaban a aburrirme, debe ser porque estaban saliendo unas 5 al año como promedio o simplemente por que sus guiones son huecos y rebuscados, colocándoles la guinda final con un giro “sorpresivo” que no pegaba ni con cola.

Al menos esta Dark Water que nos viene en acotación, tiene un guión mas o menos redondo que se olvida de mostrar falsos sustos y que sorpresivamente cuenta con un final redondo de esos que no buscan la sorpresa y el susto fácil (el cual lamentablemente parece ser lo que el público disfruta mas), además de un aceptable mensaje de familia y fraternidad. En fin, una película bien hecha sin demasiadas ínfulas y moderadamente conseguida, que sin embargo no logrará convertirse en un clásico del género ya que no cuenta con la originalidad ni la tensión necesarias para ser consideradas de esas películas que “hacen escuela”, “Dark Water” (del cual también existe una adaptación norteamericana) es tan solo una mas de las tantas que estuvieron saliendo anualmente, pero algo mas redonda.