Locke: Una lucha existencial plagada de símbolos universales

Crónicas de cine - Locke

Uno de los mejores y más creativos dramas de 2014. Y, sin duda, el guión que más me ha impresionado en lo que va de año. El 100% de la película transcurre dentro de un automóvil y tiene un solo actor. 

Recuerda a “Buried” (de 2010) y a “Detour” (de 2013), pero es mucho mejor! A algunos también le evocará a “127 Hours” (de 2010). Sin embargo, a diferencia de ellas en la cual la tensión dramática se basa en la ya clásica pugna del “querer más no poder”, en “Locke” el conflicto es diametralmente lo opuesto: poder, pero no querer. Una lucha existencial plagada de símbolos universales. La idea es tan sencilla que no se cree.

Cinta lineal con elipsis mínima (similar a “Nick of Time”, de 1995) y que no recurre a ningún recurso extra, flashmind o trucos sonoros. La actuación de Hardy es la mejor de su carrera (junto a “Bronson”, 2008).

Ampliamente recomendada a quienes disfrutan de retos de guión con estas cualidades narrativas. Una clase a mi entender, aunque es razonable que haya personas que puedan pensar que la película cojea por algún lado (dura menos de 90 minutos, como era lógico que sucediera). 

Para ponerle toda la atención a Steven Knight y lo nuevo que hará a partir de ahora (fue guionista de David Cronenberg en “Eastern Promises”, entre otros trabajos).

Excelente!